martes, 9 de julio de 2013

Temas y...¿dónde quedó la bolita?

Hace unos días, los vecinos de uno de los barrios de esta capital, se sobresaltaron al ver una gran cantidad de patrullas y elementos de diferentes corporaciones policíacas de nivel federal.
Lo primero que pensaron fue que se trataba de un operativo para capturar a algún narcotraficante o a algunos secuestradores.
O que en esos momentos alguno de los vecinos había llamado al número de emergencias para reportar algún incidente.
Pero no.
Resulta que todos aquellos elementos policíacos que habían llegado a bordo de varias patrullas, llevaban la encomienda de decomisar ¡una máquina tragamonedas! que se ubicaba afuera de una pequeña tienda de abarrotes.
La operación de aquella máquina del diablo, era ilegal y por lo tanto debía ser confiscada por las autoridades.
¿Sólo una maquinita?
¿Mover tanto elemento de seguridad para decomisar ¡una sola maquinita!?
Nadie por encima de la ley.
¡Sí, Chuy!
¿Y los grandes centros de apuestas que tienen cientos de maquinitas y que operan, muchos de ellos con licencias o autorizaciones falsas?
Hace días se dijo que se realizarían operativos para revisar cómo están operando.
¡Ah esos son intocables!
¿Pues no que en este país no existen?
Poderoso caballero es don dinero.
Regularmente quienes manejan los mal llamados casinos, son gente muy poderosa o con palancas en los altos niveles del gobierno federal.
De hecho, la operación de esos centros de apuestas no es del todo legal porque no se ha modificado la ley que los prohíbe.
Hubo un gran debate nacional sobre el tema a finales del siglo pasado, pero no hubo acuerdos al respecto.
Después, se supo que la operación de las casas de apuestas fue autorizada directamente por el que fuera secretario de Gobernación, Santiago Creel Miranda.
¿Y?
Operativos como el descrito en este espacio, se realizan en todo el país y cientos o miles de maquinitas de ese tipo son decomisadas.
No estoy a favor de que quienes las operan, por lo regular propietarios de pequeñas tiendas de abarrotes que dan servicio en las colonias de cada ciudad, porque lo ilegal, no debe permitirse.
Pero si creo que debe aplicarse la regla de todos coludos o todos rabones.
¿No cree usted?

La lectura es vida, lo demás…es lo de menos…hzr@prodigy.net.mx

No hay comentarios:

Publicar un comentario