jueves, 21 de marzo de 2013

Temas y...elefantes blancos

No es que le tenga uno tirria a las malas obras realizadas en los sexenios federales panistas.

Porque también en los regímenes priistas anteriores a la llamada docena trágica que encabezaron, Vicente Fox y Felipe Calderón, se realizaron varias que hoy son unos verdaderos elefantes blancos.

Pero cuando uno lee informaciones como la relacionada con la famosa mega biblioteca que se construyó en la capital de la república en la administración de Vicente Fox y que todavía está inconclusa, como que dan ganas de no sé qué

La mencionada obra, que se suponía debía ser la insignia de las obras culturales del sexenio foxista, es, a 7 años de haberse iniciado, prácticamente un elefante blanco.

Y no un elefante blanco cualquiera, sino uno al que se le han aplicado ya más de 2 mil millones de pesos.

Es un elefante blanco rechoncho.

¿Y sabe usted quién fue el responsable de esa obra?

El hoy diputado federal y ex alcalde de Monterrey, Fernando Lodazábal, perdón Larrazábal, el mismo que tuvo que ver con el asunto ese del más de medio centenar de muertos en el Casino Fortune de aquella ciudad norteña.

Por ahora el fuero constitucional, que ya fue abolido, afortunadamente, lo protege y ni por esa irregularidad ni otras más, ni por lo de la casa de apuestas, se le podrá fincar responsabilidad.

Lo que me desconcierta es que se haya decidido realizar esa costosísima obra cuando las bibliotecas están condenadas a desaparecer, al menos en la forma en como han venido funcionando en México desde hace muchos años, debido a los avances de la tecnología.

Hace unos meses una reportera de El Sudcaliforniano, hizo un reportaje aquí en La Paz sobre el número de bibliotecas públicas que operan y salio a relucir que ha disminuido notablemente el número de asistentes que van en busca de algún libro o documento gráfico para apoyarse en sus tareas o investigaciones.

La mayoría de las personas que solían ir a las bibliotecas, estudiantes sobre todo, ahora tienen una herramienta valiosa que les permite consultar lo que antes tenían que consultar en los recintos bibliotecarios: la Internet.

La mega biblioteca de la capital de la república tiene una infinidad de defectos, como las goteras que dañan lo que hay en ella y se le sigue invirtiendo dinero en reparaciones, que no se hacen o se hacen otra vez de muy mala calidad.

Es el cuento de nunca acabar.

Lo más triste es que en un país como el nuestro, nos demos el lujo de perder el dinero de esa manera.

Como decía el colega Lupillo ¡Ni modo!.

La lectura es vida, lo demás es lo de menos…hz@Prodigy.net.mx





No hay comentarios:

Publicar un comentario